Síndrome de Wilkie

El Síndrome de Wilkie o Síndrome de la Arteria Mesentérica Superior (SAMS) es una causa poco frecuente de obstrucción intestinal alta, resultante de la compresión de la tercera porción duodenal entre la aorta abdominal y la arteria mesentérica superior (AMS) en su origen, en relación con la reducción del panículo graso retroperitoneal.

Es más frecuente en mujeres jóvenes y la mayoría de los casos se presentan después de una pérdida de peso importante. Recientemente se han publicado casos relacionados con la pérdida rápida de peso tras cirugía bariátrica.

Los síntomas del SAMS son inespecíficos, pudiendo presentarse como intolerancia a la alimentación con náuseas y vómitos, pérdida de peso, saciedad precoz, distensión abdominal y dolor epigástrico. El dolor alivia en decúbito prono, decúbito lateral izquierdo o en posición genupectoral, maniobras que relajan la presión de la arteria mesentérica sobre el duodeno.

Los criterios diagnósticos de SAMS son duodeno dilatado, compresión del duodeno por la AMS y ángulo aortomesentérico menor de 20 grados. El diagnóstico definitivo se realiza mediante un TAC vascular.

El tratamiento consiste en terapia nutricional para ganar peso y así mejorar la sintomatología, ya que al aumentar la grasa que rodea las estructuras retroperitoneales se consigue en cierta medida que la AMS no comprima el duodeno. En aquellos casos en los que no se consigue ganar peso y el dolor, así como la incapacidad de realizar adecuadamente las digestiones, condiciona el poder llevar una vida normal, hay que plantear la cirugía. La técnica quirúrgica más adecuada no está demostrada en la literatura, ya que hay escasa experiencia y los resultados son poco optimistas.

En nuestra serie estamos teniendo muy buenos resultados con técnicas de derivación gastrointestinal que consiguen mejorar el dolor abdominal. Con ello, nuestros pacientes vuelven a comer con normalidad y a ganar peso paulatinamente.

"Siempre es un riesgo operar a un paciente con Síndrome de Wilkie ya que no está claro que la cirugía resuelva por completo el dolor abdominal o que pueda realizar una ingesta sin limitaciones, pero si conseguimos mejorar su calidad de vida, eso es algo que estos enfermos te agradecen toda la vida".